lunes, 19 de junio de 2017
"¿Quiénes eran los hijos de Dios y las hijas de los hombres en Génesis 6:1-4?"
Génesis 6:1-4 nos dice, “Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas, que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y dijo Jehová: No contenderá mi Espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre.” Ha habido muchas opiniones sobre quiénes eran los hijos de Dios, y por qué los hijos que tuvieron ellos con las hijas de los hombres crecieron como una raza de gigantes (así parece indicarlo la palabra “Nephilim” = gigantes).
Las tres primeras opiniones sobre la identidad de los “hijos de Dios” son que (1) eran ángeles caídos, o (2) poderosos gobernantes humanos, o (3) los buenos descendientes de Set, que se casaron con los descendientes malos de Caín. Apoyando a (1) es el hecho de que en el Antiguo Testamento la frase “hijos de Dios” siempre se refiere a ángeles (Job 1:6¸21; 38:7). Un problema potencial con (1) es el hecho de que Mateo 22:30 indica que los ángeles no se casan. La Biblia no nos da razón para creer que los ángeles tienen género o son capaces de reproducirse. Las opiniones (2) y (3) no tienen este problema.
La falla en las opiniones (2) y (3) es que los hombres humanos ordinarios que se casaron con mujeres humanas ordinarias, no tuvieron por qué producir “gigantes” o “héroes de la antigüedad, o varones de renombre.” Más tarde, ¿Por qué decidió Dios traer el Diluvio sobre la tierra (Génesis 6:5-7) cuando Dios nunca prohibió que hombres humanos poderosos o descendientes de Set se casaran con mujeres humanas ordinarias o descendientes de Caín? El siguiente juicio en Génesis 6:5-7 está ligado a lo que tuvo lugar en Génesis 6:1-4. Solo el obsceno y perverso matrimonio de ángeles caídos con mujeres humanas parecería justificar la dureza de este juicio.
Creo que la opinión (1) es la más indicada. Sí, es una interesante “contradicción” decir que los ángeles no tienen sexo y luego decir que los “hijos de Dios” eran ángeles caídos que procrearon con mujeres humanas. Sin embargo, aunque los ángeles son seres espirituales (Hebreos 1:14), también pueden tomar formas humanas (Marcos 16:5). Los hombres de Sodoma y Gomorra querían tener sexo con los dos ángeles que estaban con Lot (Génesis 19:1-5). Es admisible que los ángeles sean capaces de tomar forma humana, aún al punto de duplicar sus características sexuales y posiblemente hasta su reproducción. Pero, ¿por qué los ángeles caídos no siguieron actuando de esta manera? Parece que Dios “encerró en prisiones de oscuridad” a los ángeles caídos que cometieron este abominable pecado, para que los otros ángeles caídos no hicieran lo mismo (como se describe en Judas 6). Los primeros intérpretes hebreos, escritos apócrifos y pseudoepígrafos son unánimes en sostener la opinión de que los ángeles caídos son los “hijos de Dios” mencionados en Génesis 6:1-4. Por supuesto que esto no cierra el debate. Sin embargo, la opinión de que Génesis 6:1-4 involucra a ángeles caídos apareándose con mujeres humanas tiene fuertes bases contextuales, gramaticales e históricas.